Dr. Lina Triana

Ácido hialurónico o botox ¿Cuál es el procedimiento ideal para mí?

El ácido hialurónico y el botox se han convertido en aliados de las prácticas estéticas para mejorar la piel. Estas sustancias, aunque distintas en su naturaleza y aplicación, tienen como punto común la capacidad de ayudar a mejorar la apariencia facial.

En este video de la Doctora Lina Triana, explica las diferencias sobre estas sustancias y cuál es mejor como apoyo estético: Ácido hialurónico o botox ¿Cuál es el procedimiento ideal para mí?.

Ácido hialurónico: la hidratación renovada

El ácido hialurónico es una sustancia natural presente en nuestro cuerpo, especialmente en la piel, tejidos conectivos y fluidos articulares. Su función principal radica en la retención de agua, lo que contribuye a mantener la piel hidratada y con un aspecto juvenil. A medida que envejecemos, la producción de ácido hialurónico disminuye, llevando a la pérdida de elasticidad y la formación de arrugas.

En las prácticas estéticas, el ácido hialurónico se utiliza como un relleno en la piel. Se inyecta en áreas específicas de la cara para restaurar el volumen perdido, suavizar arrugas y líneas finas, y realzar contornos faciales. Este procedimiento es eficaz y seguro, ya que el ácido hialurónico es biocompatible y se descompone de manera natural con el tiempo.

Botox: relajación muscular

Contrario a lo que muchos creen, el botox, o toxina botulínica, no se utiliza únicamente con fines estéticos. Originalmente desarrollado para tratar trastornos neuromusculares, su aplicación cosmética se ha vuelto recurrente. El botox actúa bloqueando temporalmente la señal nerviosa que provoca la contracción muscular, lo que suaviza las líneas de expresión y arrugas.

Las áreas más comunes de tratamiento con botox incluyen las líneas de la frente, las patas de gallo alrededor de los ojos y las líneas entre las cejas. A diferencia del ácido hialurónico, el botox no rellena, sino que relaja los músculos, proporcionando un aspecto más descansado y rejuvenecido. Los resultados son notables después de unos días pero su duración varía, generalmente de tres a seis meses.

Tratamientos complementarios: un enfoque integral

Si bien el ácido hialurónico y el botox se utilizan para diferentes necesidades estéticas, muchos profesionales combinan ambos tratamientos para obtener resultados más completos y armoniosos. La hidratación profunda proporcionada por el ácido hialurónico se complementa con la relajación muscular estratégica del botox, creando un aspecto rejuvenecido y natural.

Es crucial destacar que la consulta con un profesional médico cualificado es esencial antes de someterse a cualquier procedimiento estético. Cada persona tiene necesidades y características únicas, y un enfoque personalizado garantiza resultados satisfactorios y seguros.